jueves, 16 de mayo de 2013

PROYECTO NACIONAL Y POPULAR: MUCHO MÁS QUE UNA FRASE HECHA.



Angel Akike, Concejal y Referente en la Tercera Sección
 Electoral por el Frente Transversal Nacional y Popular.
Nuestro Gobierno Nacional, es un gobierno activo, atento y operativo que todo el tiempo está evaluando problemas, pensando soluciones y activando políticas para darles respuestas concretas. ÉSTE gobierno siempre ha sido así.
En los últimos meses se presentaron proyectos de leyes, y acciones concretas de tal magnitud y trascendencia político económicas que han generado en la oposición política y a los intereses económicos internos y externos -una vez más- la desesperada necesidad de salir al cruce para ensuciar y distorsionar todo cuanto del Poder Ejecutivo surja.
No tienen fin los intentos por frenar al gobierno, defender intereses que no son los del conjunto social, y dicho sea de paso, en la batalla por oponerse, dejan a la vista su inconsistencia e incapacidad para presentar un programa alternativo propio que ofrecer al pueblo argentino. Todo ello en el contexto de un año electoral, en el que los tiempos se acortan y la carrera ha comenzado.
Debe ser difícil y agobiante frenar la avanzada de un Gobierno que sabe lo que quiere y no pierde un
minuto en la marcha  hacia sus objetivos y al mismo tiempo enfrentar las elecciones armando engrudos y pegotes endebles entre elementos incompatibles que no pueden disimular sus profundas fisuras.
Medidas cautelares, pedidos de inconstitucionalidad, marchas difusas, carpas ostentosas, abandono de legisladores de su obligación de estar allí en el Congreso discutiendo como corresponde, todo ello por supuesto con el respaldo de los medios concentrados del poder mediático son las reacciones exasperadas de una oposición al servicio de cualquiera menos del Pueblo Argentino.
Así asumen la oposición distorsionándolo todo, tildando de tirano a un gobierno elegido por la mayoría del pueblo, que no es dios, no sabe todo, ni está en todos lados al mismo tiempo. Pero sí se ha propuesto, con los mejores cuadros políticos y técnicos abarcar los múltiples y complejos problemas que como Gobierno Nacional debe atender, en el marco de la ley y con la legitimidad que le dio el voto popular.
Lo que les revienta a los opositores, permítaseme la expresión, es el objetivo, es la metodología, es la capacidad y la existencia de un plan. En criollo esto es: gobernar para la totalidad del Pueblo argentino; llevar al Congreso de la Nación los temas más álgidos para que todo se haga en la más profunda legalidad; y tener un equipo de primera que planifica todo cuanto se hace.
Porque hay que decirlo de una buena vez, no tenemos un gobierno improvisado, que se levanta cada mañana pensando, a ver ¿hoy que podemos hacer? Nada más lejos que eso.
Pero es una idea -¡improvisación y tiranía!-, que han intentado instalar una y otra vez en la cabeza de los argentinos. Y se aferran a lo que sea para ello.
En los últimos días la oposición ha encuadrado en esta falsa idea, la diversidad y celeridad con que se presentaron,para su consideración en el Congreso, proyectos de ley y legítimos actos de gobierno.
Se olvidan u ocultan en sus declaraciones -mientras se desgarran las vestiduras- que:
·         La Argentina de hoy, no es las que nos dejaron muchos de ellos en el 2001, y que éste gobierno sacó del mismísimo infierno;
·         Logramos algo inédito que es la soberanía económica al desendeudarnos y que es una decisión política no volver a la pesadilla de los préstamos a costa de las imposiciones genocidas de los organismos financieros;
·         Estamos en medio de la peor crisis del capitalismo mundial, después de la de 1930 y que aun así, seguimos de pie, mientras vemos como se derrumban países del 1er. mundo, tan añorado por muchos. Es más, resulta una prioridad intervenir desde el Estado para que los efectos de esta crisis nos dañe lo menos posible.
Se niegan a reconocer que Éste Gobierno no es ni sordo, ni ciego, y por lo tanto:
·         Busca conciliar los intereses intersectoriales, con medidas que beneficien a todos. 
·         Sabe reconocer el largo camino que falta recorrer para lograr la mayor equidad e igualdad para su pueblo, y trabaja sin descanso para acortar la brecha que aún persiste.  
·         Se atreve a impulsar reformas en el único Poder del Estado que ha permanecido indiscutido y negándose a la autocrítica, mientras la republica vivía las páginas más negras de su historia. y se atreve porque de él depende también que logremos la igualdad y equidad tan ansiada.
·         Impulsa la unión y fortalecimiento de los lazos sociales, culturales, políticos y económicos con los hermanos países de Latinoamérica. Porque no podremos sobrevivir a un mundo en caos, sin el mutuo soporte y colaboración.
Todo esto que se pretende negar, olvidar u ocultar es nada más y nada menos que lo que hay detrás de las leyes de Democratización de la Justicia; el Certificado de Estímulo para la Producción Agropecuaria Argentina; los convenios firmados con Brasil y Venezuela; y del mal llamado Proyecto de blanqueo de capitales, por dar algunos ejemplos.
EL PROYECTO NACIONAL Y POPULAR, señores, no es un slogan de campaña. Es un proyecto con directrices claras, con políticas concretas y con la flexibilidad necesaria para hacer frente a los cambios internos y externos sin alejarnos del principal objetivo: el bienestar de los 40 millones de argentinos, con una política económica de crecimiento y desarrollo con inclusión social y en el que se articulan todos los sectores de la economía.  
Angel Akike, 16 de mayo de 2013

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Traduce esta página a los diferentes idiomas

Vistas de página en total