Angel Akike, Concejal de Almirante
Brown por el Frente Para la
Victoria fue notificado, intimado y apercibido mediante carta
documento de fecha 17/9/13 por el apoderado de la Municipalidad y
candidato por el Frente Renovador Dr. Daniel Roggero.
Este hecho es grave y amerita que
la ciudadanía tome conocimiento porque constituye no solo una amenaza y
persecución a un representante del pueblo elegido en el ejercicio de sus
funciones, sino un claro atentado contra la democracia y la libertad de opinión
y expresión.
Todo surgió después de la sesión del
HCD del 22 de agosto del corriente, en la que el concejal fundamentó su
posición negativa a la iniciativa del Ejecutivo de utilizar el 50% de los
Recursos Económicos que la
Provincia coparticipa al Municipio en carácter de "Fondo
Educativo", en el
marco de la Ley Nacional
26.075, para la construcción de un "Centro Cultural de las Artes y las
Ideas", que nada tiene que ver con las escuelas públicas del Distrito.
La negativa a permitir que el
Intendente Giustozzi utilice dichos fondos para destinos no comprendidos en el
Art. 2 de dicha ley, fue acompañada por la totalidad del Bloque del Frente Para
la Victoria,
el Bloque del ARI, el Bloque de la
UCR y el Bloque CET. Asimismo, se destaca, tomó inmediato
estado público a través de los medios que habitualmente cubren las sesiones
legislativas.
Rápidamente, distintos actores y
sectores político-sociales locales salieron a apoyar la negativa respecto a la
decisión del Ejecutivo Municipal, hecho que evidentemente irritó y dejó en una
incómoda posición al Intendente.
Al no poder defender su decisión, al
ver afectada su imagen en un período electoral en el que enfrenta un duro
desafío, optó -un mes después de la sesión- por el ataque.
En efecto, su mayor desafío es
justificar ante la ciudadanía por qué, a pesar de haber sido electo para llevar
adelante el Proyecto Político que lidera la Presidenta Cristina
Fernández, decidió seguir gobernando desde un espacio político opositor a dicho
proyecto.
Esta reacción intimidatoria es típica
de quien, impotente por saberse puesto en evidencia, elige el peor de los
caminos, que es el de judicializar la política, el debate, y acallar a quienes
plantean posiciones discordantes.
Lo más grave es que esta embestida no
es sólo contra un concejal; en realidad es un atropello al conjunto de los
concejales y al Cuerpo Deliberativo mismo.
Es preocupante que los ediles que hoy acompañan a Darío Giustozzi en el Frente
Renovador y que son mayoría, no han tomado nota de este alarmante hecho. Por el
contrario, en la última sesión del 19/9, al rechazar la moción de Privilegio
presentada por Angel Akike, han estrechado su dependencia con el ejecutivo
atentando contra el propio cuerpo al que pertenecen.
Se dice muchas veces -erróneamente- que
en política todo vale, sobre todo en tiempos electorales. Sin embargo,
deberíamos ampliar las miras y evaluar el daño que ciertas acciones pueden
generar en la vida institucional y democrática local.
Ya es bastante anómalo que a pesar de
que el 71% del pueblo eligió ser gobernado por el Frente para la Victoria, a dos años de
la elección, estemos de hecho en manos de un Intendente con mayoría en el
Concejo Deliberante perteneciente al Frente Renovador, alianza política que no
existía en el 2011.
Es esencial que no agreguen al
menosprecio de la voluntad popular, hechos
graves como los que se vienen consumando desde el lanzamiento de la campaña:
agresiones físicas a compañeras y compañeros en el acto conmemoratorio del
aniversario del fallecimiento de Evita, incluyendo al Concejal Mariano H.
Grandoli mientras conversaba con el Concejal del Frente Renovador Lucas
Carballal, y ahora esto: la negación abierta al derecho y a la obligación de un
concejal de ejercer sus funciones con libertad, y el desdén por el rol que por
ley debe cumplir un Concejo Deliberante para ser verdaderamente HONORABLE.
Bloque Frente para la Victoria Almirante
Brown.